Partimos del Aeropuerto de Lima a las 14:55 horas y llegamos a la Ciudad de Arequipa a las 16:30, en un clima maravilloso.
Agradecemos a la señora Mirian, Administradora del Hotel Latino y su esposo que fueron a recogernos y nos trataron muy bien. Como todo deportista dejamos las cosas y nos fuimos a entrenar al Dojo del Sensei Doland, de regreso salimos a conocer esta bella ciudad de noche, los Restaurantes en el Centro son hermosos ya que tiene una vista a toda la Plaza de Arequipa, probamos el Mate de Coca y algunos aperitivos, luego paseamos por la Plaza, conociendo también la Catedral, los chicos aprovecharon en divertirse y jugar por la pileta y alrededores. Esta primera salida sirvió mucho para unir más al grupo.
Nuestro segundo día iniciamos muy bien, con un rico desayuno Arequipeño: pan, jugo de papaya, mermelada de Higo, leche fresca y café pasado. Fuimos camino al Centro para iniciar nuestro Tour de Campiña que duraría 04 horas; salimos a las 11:30 am rumbo al Distrito de Yanahuara, un barrio colonial con calles pintorescas y que en su plaza está ubicado el Mirador, donde se puede apreciar la ciudad y sus volcanes, también conocimos la Iglesia San Juan Bautista, la cual fue terminada entre los años 1730 a 1750. Por primera vez todo el grupo probamos el riquísimo Queso Helado, postre tradicional de esta bella ciudad.
Ahora nos dirigimos al Mirador de Carmen Alto, ubicado al norte de la Ciudad, donde pudimos ver al Misti en su máximo esplendor, también apreciamos andenerías, zonas de cultivo y la casa de retiro.
Listos para partir a la Mansión del fundador, casona de corte Colonial, que hoy en día es un Museo que guarda piezas de arte, muebles de diversas épocas y objetos de colección, pasamos también por el Balneario de Tingo, es un lugar de recreación que cuenta con piscinas y un lago artificial.
Después de más de 3 horas de recorrido estamos por finalizar nuestro Tour de Campiña, camino a los Molinos de Arequipa, hoy declarado como patrimonio Cultural, pasamos también por el Palacio de Goyeneche, es una de las construcciones civiles más conocidas de Arequipa. No podíamos dejar la oportunidad de pasear a caballo, tanto para mí como para los chicos fue una experiencia muy bonita, al principio se sintió una adrenalina, pero luego el paisaje nos fue relajando.
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